Hace una semana en este blog se habló de los escapes de líquido
cianurado en Pcia de San Juan. La empresa responsable, Barrick Gold, al igual que durante el
derrame del año anterior, había desdramatizado el asunto.
Pero hoy con la rapidez y liviandad de una brisa veraniega, reconoce los hechos a través de Juan Bautista Ordoñez, director ejecutivo de la firma de capitales canadienses:
Pero hoy con la rapidez y liviandad de una brisa veraniega, reconoce los hechos a través de Juan Bautista Ordoñez, director ejecutivo de la firma de capitales canadienses:
"un desplazamiento de piedra fuera del valle por
una cañería impactada por un pedazo de hielo de una tonelada y media".
Ese accidente "desajustó las juntas y la
cañería que lleva solución de procesos, que es una mezcla de cianuro, agua y
metales, lo que produjo que ese mineral sobrepasara los bordes del valle"
de lixiviación. (…) Ordoñez admitió que este
nuevo episodio "sin dudas fue un incidente grave" pero "mucho
mejor" que el del año pasado, cuando se desató uno de los mayores accidentes ambientales de la
minería argentina y tuvo como protagonista a la misma compañía”.
Qué facilidad para desdecirse de la realidad. Querido lector Haga memoria. La semana pasada le habían comunicado que no había problemas. Lo cual nos dispara la pregunta ¿Por qué tolera que le mientan una y otra vez?
¿Todas estas declaraciones acaso no tienen un tono insolente?
Parecieran una burla hacia la gente
común. Y mucho más si se lee el siguiente comentario:
(El periodista Juan Miceli preguntó al empresario ya nombrado, en una entrevista que realizó para La Nación):
La ley de glaciares de 2010, en su artículo 6, prohíbe la explotación y exploración minera. Usted dice que un bloque de hielo de 1000 kilos golpeó la cañería, ¿es el de un glaciar?
-Este es un tema muy delicado y tenemos que ser especialmente prudentes para no opinar sobre temas que no conocemos. No soy un glaciólogo, así que me voy a cuidar muy bien de hacer comentarios.
-Este es un tema muy delicado y tenemos que ser especialmente prudentes para no opinar sobre temas que no conocemos. No soy un glaciólogo, así que me voy a cuidar muy bien de hacer comentarios.
No queda nada más que decir… UNA VERGÜENZA. Resulta que el insidente del año pasado que según ellos no era tan grave, ahora sí lo es. Y el presente "es grave" ... ¿pero no tanto? Quién puede creer este desajuste de engaños y autorefutaciones. NADIE.
Era necesario quitar
la carga impositiva como lo hizo el Presidente M. M. a esta empresa que gana
fortunas increíbles en pocos días, destruye montañas, contamina agua, se lleva los metales superconductores
y no nos deja nada. Claro que no.